Para el caramelo, poner el azúcar en una olla, cubrir con agua y dejar a fuego medio hasta que tome un color claro.
Retirar, y cubrir el fondo y los bordes de un molde de 24 cm de tubo central, esparciendo bien y parejo.
Reservar.
Para el flan, en un bol batir ligeramente los huevos hasta que rompan su liga.
Luego incorporar la mitad de la leche, mezclar bien y agregar la mitad restante. En este punto incorporar en tres veces el azúcar, por último la esencia, y volcar en el molde acaramelado.
Tapar con papel aluminio, poner el molde en baño María y hornear a temperatura moderada por 50 minutos o hasta que al mover el molde el centro esté firme y al tocar la superficie, ésta ofrezca resistencia.