Arenar la harina con la manteca fría; unir con un chorrito de agua fría; y reservar en heladera.
Estirar, forrar una tartera de 30 y reservar en frío.
Para el relleno, cocinar la calabaza con su cáscara en horno o microondas; pelar y hacer un puré.
Picar la cebolla, rehogar en la manteca, agregar la harina de golpe y, sin dejar de revolver, formar un roux. Incorporar de a poco la leche tibia y seguir revolviendo hasta que espese.
Volcar el choclo, el puré y el queso; fuera del fuego, los huevos; condimentar; rellenar la tarta y hornear.